Donde Quirón se encuentra por signo zodiacal es donde absolutamente conocemos mejor, y de hecho, es probable que defendamos o prediquemos las lecciones de ese signo o casa, pero nos cuesta absorber estas lecciones y aplicarlas a nuestra propia vida.
Cuando Quirón está en nuestras cartas, somos especialmente sensibles y vulnerables, y aunque este es el caso de Saturno, por ejemplo, la diferencia es que suele haber mucha auto-honestidad y auto-conciencia o apertura para entender estas inseguridades.
He visto interpretaciones de Quirón que se parecen mucho a la de Saturno, pero ayuda a reconocer sus diferencias. Saturno es, sin duda, un punto doloroso en nuestras cartas, pero puede haber mucha actitud defensiva y de negación, mientras que Quirón se siente más como un pozo sin fondo: somos hipersensibles e hiperconscientes en estas áreas.
Tendemos a sobrecompensar en las áreas de Quirón porque no nos sentimos lo suficientemente buenos o porque nunca podemos hacer lo suficiente; y si elegimos ignorar estas áreas, nos aferramos a niveles irrazonables de culpa. Tenemos una enorme sabiduría y puntos de vista únicos en estas áreas debido a nuestra hipersensibilidad. Debemos estar atentos a las expectativas irrazonables que tenemos de nosotros mismos en estas áreas sensibles.
La clave de la resolución no es sólo aprender a confiar en nosotros mismos, sino también abrazar nuestra sensibilidad y encontrar la belleza en nuestra imperfección. En otras palabras, no se trata necesariamente de “superar” los problemas en estas áreas, sino de reconocer nuestras vulnerabilidades en las áreas de Quirón y trabajar con ellas.